Bogotá IV: Viajamos para comer...

El último post del viaje a Bogotá quise dedicarlo completamente a la gastronomía. Un viaje para mi no es sólo visitar lugares nuevos sino sumergirme en esa extensión infinita de sabores que te ofrecen. Me dedico a descubrir esos nuevos sabores o simplemente a reencontrarme con sabores perdidos en la memoria de mis raíces. La gastronomía colombiana es bastante variada, muy parecida a la gastronomía venezolana, para comenzar compartimos las arepas, asadas, fritas, dulzonas, rellenas... En la zona de Usaquén visitamos el restaurante Casa Vieja, tiene buenas opiniones en tripAdvisor; no está mal, pero el precio es bastante alto comparado con otros restaurantes. Comimos lengua en salsa, sobrebarriga (aún nos preguntamos que tipo de carne es), morcilla con arepa, y unas carimañolas que desaparecieron mágicamente. 
Al día siguiente luego de un largo recorrido por La Candelaria encontramos casualmente un asadero que se llama Capibara, fue un gustazo comer aquí, música llanera y carne asada, servicio impecable, platos abundantes y super bueno y precio inmejorable. Se encuentra cerquita del Museo Botero y vale la pena una parada en este lugar.
Por el mercado de Usaquén no pueden dejar de probar lo que no conozcan, finalmente probamos el elote asado, se llama también choclo o jojoto,  es una mazorca pero con granos un poco más grandes. No pueden dejar de probar las obleas con arequipe (dulce de leche), coco y mora, esto si ha sido un viaje a la infancia, no pude evitar comerme una cada vez que la veía. 
Ya cuando fuimos a Monserrate probamos la famosa bandeja paisa, un plato bomba con frijoles, arroz, huevo frito, carne molida, chorizo, chicharron, arepa, plátano frito, y aguacate, una bomba deliciosa ideal para recuperar energías. 
Con el frío de Bogotá un par de veces probamos un par de veces el ajíaco santafereño que es una deliciosa sopa de pollo con aguacate, en otra ocasión probé una sopa de patacones que es una ricura. 
No pudimos ir al restaurante de Andrés Carne de Res pero visitamos la Plaza de Andrés en el Centro comercial Santa Fe, es difícil elegir en este amplio recinto gastronómico, nada mal los jugos y las hamburguesas, pero la variedad es increíble. 
En la zona de Usaquén hay un lugar que se llama Zona Container, un espacio interesante, aunque fuimos un domingo en la noche algunos restaurantes estaban cerrados, pero me arriesgué a comer en un lugar que se llama Bimbi, cuando hice el pedido no sabía de que se trataba, "Chuzo desgranado mixto" practicamente es una montaña de comida (pollo y carne picado, queso, lechuga, papitas, maíz, cebolla, pimentón, salsas de varios tipo, digamos que es una especie de hamburguesa picada sin pan. 
Algo que no se puede evitar en general por toda Bogotá es pararse a tomar un tinto en alguna cafetería, los amantes del café seguramente disfrutaran cada café que se tomen. 
El Parque de la 93 es seguramente un buen lugar para dar un paseo y comer o simplemente merendar en uno de los tantos café que hay alrededor, es también un buen lugar para pasar un rato agradable con niños, o simplemente para tomar un descanso en la plaza. Cerca de allí hay un parque que se llama Parque del Chicó es también una buena alternativa para una merienda en el café-bus de dos pisos y pasar un rato agradable. 
En Bogotá el único problema será la dificultad de elegir, hay una gran variedad gastronómica y como dice Andrew Zimmern: "Si se ve bien... ¡pruébalo!"

1 comentario:

Johan Poveda dijo...

Excelente Blog felicitaciones, cuanto te costo la entrada a la catedral de sal, ese sera mi proxima viaje que me aconsejas :D