Zipaquirá es una parada obligada para quienes están al menos tres días en Bogotá. Es un pueblo a unos 30 minutos de la ciudad y es muy fácil llegar con el transporte público. Desde el portal norte del transmilenio tomar un bus intermunicipal hacia Zipaquirá, a cada momento salen buses muy cómodo a un precio económico, no vale la pena pagar un taxi. El recorrido es de 45 km, y del caos de la ciudad pasamos a largas extensiones verdes.
Zipaquirá es un lindo pueblo colonial que ha sabido desarrollar sus potencial turístico, su principal sitio de interés es la Catedral de Sal, que se encuentra al interno de la mina de sal. La antigua Catedral fue realizada en el 1950 y cerrada en el 1990 por falta de seguridad, se decide así construir una nueva Catedral que fue culminada en el 1995. Esta nueva Catedral posee todos los servicios y seguridad necesaria como centro turístico y religioso, para visitarla se desciende dentro de la mina y se va atravesando las estaciones del Viacrucis, cada estación es representada por pequeños altares tallados en las paredes y suelo de la mina. Al final se encuentra la cúpula tallada también en la parte superior de la mina y desde donde se puede ver la enorme cruz que se encuentra en el altar.
El recorrido se hace acompañado con un guía que va explicando cada detalle, una vez culminado el recorrido el regreso se hace sólo, es posible también ver un pequeño documental sobre la mina de sal, es opcional hacer el recorrido del minero (niños mayores de 6 años). Hay también un show de luces, y hay un área dedicada al comercio donde puedes comprar algunos souvenir, y una gran variedad de esmeraldas. El recorrido es bastante sencillo, si eres claustrofóbico no creo tengas ningún problema, la mina es bastante amplia y hay iluminación, igual personas con sillas de ruedas pueden acceder sin problema. Mayor información visitar la página web de la Catedral de Sal.
Fuera de la mina hay un museo dedicado a la mina, hay juegos y actividades para niños.
El recorrido se hace acompañado con un guía que va explicando cada detalle, una vez culminado el recorrido el regreso se hace sólo, es posible también ver un pequeño documental sobre la mina de sal, es opcional hacer el recorrido del minero (niños mayores de 6 años). Hay también un show de luces, y hay un área dedicada al comercio donde puedes comprar algunos souvenir, y una gran variedad de esmeraldas. El recorrido es bastante sencillo, si eres claustrofóbico no creo tengas ningún problema, la mina es bastante amplia y hay iluminación, igual personas con sillas de ruedas pueden acceder sin problema. Mayor información visitar la página web de la Catedral de Sal.
Fuera de la mina hay un museo dedicado a la mina, hay juegos y actividades para niños.
Esta Catedral es considerada la maravilla principal de Colombia, pero esto pertenece a nuestro tiempo presente, en épocas pasada y hablamos del 1600 cuando se fundó Zipaquirá era la ciudad más importante de Colombia por su mina de Sal, la sal era un producto altamente cotizado e importante de la época. Aún hoy la mina sigue produciendo sal bajo otros métodos de explotación y nos regala además en su interior la hermosa Catedral de Sal, no dejes de visitarla, en el mundo existen sólo dos. La Catedral de Sal de Zipaquirá - Colombia, y la Catedral de sal de Wieliczka - Polonia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario